Una caída más del Barcelona, y otra vez como visitante, esta vez ante el Levante ante quién cayó por 3-1 y dejó en claro que solamente con Messi, no es posible volver a mostrar esa imagen de imbatible de tiempo atrás.

El gol culé lo convirtió Lionel Messi, de penal, mientras que para los locales anotaron Campaña, Mayoral y Radoja.

En un partido cerrado, en el que ambos equipos se repartieron el dominio de la pelota en la primera mitad del encuentro, la diferencia estuvo en 10 minutos del segundo tiempo, ante un Barcelona dormido que vió como su rival le convertía en tres ocasiones.

Para colmo en el cierre de la etapa inicial, el uruguayo Luis Suárez tuvo que salir de la cancha por una dolencia en su tobillo derecho e ingresó en su lugar Carles Pérez.

Otra pálida imagen del conjunto dirigido por Valverde, que a veces parece un equipo sin reacción, sin sangre, lejos del nivel de otrora.

BUENOS AIRES, NA

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