La Selección española derrotó por 2 a 1 a Inglaterra, en la final de la Eurocopa 2024. El último gol del partido lo consiguió el extremo Mikel Oyarzabal, a tan sólo cinco minutos del final del encuentro.

Cuando el partido llegaba a su final y el empate permanecía, una aparición desde la izquierda del lateral Marc Cucurella con un profundo centro rasante permitió la llegada de Oyarzabal por el medio. El extremo empujó la pelota a la altura del área chica y le cambió la trayectoria, haciéndola inatajable para el arquero Jordan Pickford y decretando el título español.