Arsenal logró un valioso punto en Brasil tras igualar 0 a 0 frente a Ceará y se mantuvo con chances de pasar de ronda, al cabo de un atractivo encuentro disputado esta noche, en el estadio "Castelão", por la cuarta fecha de la zona C de la Copa Sudamericana.

En medio de un trámite equilibrado, sendas formaciones se repartieron aciertos y errores, por lo que la paridad final se ajusta a lo acontecido en el campo de juego.

Ceará y Bolívar de Bolivia son los líderes con 6 puntos, luego sigue Arsenal con 5 y cierra jorge Wilstermann también de Bolivia, con 2, cuando faltan dos fecha para el cierre de la fase.

La expectante posición de ambos en la tabla de merecimientos a priori le daba al cotejo un tono relevante.

Con el objetivo de quedarse con los tres puntos sendas formaciones plantearon con cierta audacia sus respectivas estrategias pero desde el vamos pareció algo más compacta la formación brasileña.

La visita apenas insinuó algo en ofensiva mediante algún remate de Alan Ruíz, aunque resulta justo consignar que Ceará nunca lo dominó a voluntad pese a crearle algo más de peligro.

Sin demasiada claridad, el dueño de casa colocó en aprietos a Alejandro Medina en contraposición a las nulas intervenciones del arquero Richard, quien prácticamente no participó del juego.

En el complemento no varió demasiado el dispositivo táctico de los dos equipos aunque el cuadro de Augusto Sérgio Ferreira potenció su búsqueda en desmedro de un Arsenal que de a poco se fue "enamorando" de la paridad.

Algo afianzado al advertir que su adversario cada vez tenía menos potencia en ataque, el conjunto del Viaducto se animó sobre el final a partir de algunas sustituciones algo más arriesgadas ordenadas por su entrenador Sergio Rondina.

Producto de ese saludable soplo de aire fresco Arsenal estuvo a punto a ganar el match sobre la misma expiración del tiempo reglamentario tras un soberbio cabezazo de Albertengo, quien provocó una no menos virtuosa atajada del guardavallas del dueño de casa, quien volando sobre su ángulo inferior izquierdo llegó a manotear el balón antes que el mismo trasponga la línea de sentencia.

Esa eventual conquista del elenco visitante hubiese premiado su arrebato final pero hubiera estado en discordancia a la paridad y al continuo cambio de dominador que tuvo el desarrollo y que derivó en un empate a todas luces justo ya que se repartieron aciertos y errores en idénticas proporciones.

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