Ana Gallay, entre los Juegos Olímpicos y la ayuda social
La entrerriana, integrante de la Selección argentina femenina de beach voley, se expresó de cara a los JJOO de Tokio y habló de las actividades que realiza pese a encontrarse a punto de comenzar la competencia en la máxima cita del deporte.
La entrerriana Ana Gallay, integrante de la Selección argentina femenina de beach voley, se expresó hoy de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio y habló de la ayuda social que realiza pese a encontrarse a punto de comenzar la competencia en la máxima cita del deporte.
"Lo más lindo es estar en la villa, cruzarse con todo tipo de deportistas, desde los más amateurs a los famosos y súper profesionales porque acá somos todos iguales y estamos en la misma sintonía. Recién bajé en el ascensor con (Luis) Scola y charlamos un rato. Yo no jodo a nadie, no me gusta pedirles fotos ni nada, apenas conocer cómo están y cuándo compiten".
En dupla con Fernanda Pereyra, en su tercer Juego Olímpico, Gallay debutará este viernes contra la pareja brasileña que ocupa el primer puesto del ranking mundial, conformada por Eduarda Santos Lisboa, más conocida como 'Duda', y Agatha.
Ante esto, Gallay remarcó: “A ambas nos falta ritmo de competencia, pero dejaremos todo. El primer partido, con Brasil, es el más difícil y luego, en la zona tenemos a Canadá y China. Debemos ganar al menos uno para tener posibilidades de avanzar. Pasan los dos primeros de cada zona (son seis), los dos mejores terceros y después hay un repechaje por otros dos lugares”.
"Estoy muy feliz, cómoda y disfrutando como nunca. Esta vez vine más relajada, a pasarla bien y sin meterme presión. Aprendí después de lo que viví en Río 2016, que fuimos de otra manera y, con el público argentino y lo que se generó, me terminó jugando una mala pasada", señaló.
Y continuó: "No es fácil, porque cuando sentís que podés ganar, la presión es casi inevitable, pero ahora, como no llegamos en nuestro mejor momento, preferimos tomarlo de otra forma con Fer".
Además, la deportista hace casi cuatro años pertenece al programa solidario Huella Saint-Gobain, que elige lugares carenciados y los mejora desde la infraestructura con sus materiales para la construcción.
“Yo no pasé hambre, como mucha gente hoy, pero la verdad es que mi familia tuvo que hacer sacrificios y me ayudó mucho, por eso me gusta hacerlo a mí. Siempre quise hacerlo, ayudar a cambiar la realidad de la gente que necesita, pero no podía, no es nada fácil para un atleta amateur. Hasta que Saint-Gobain apareció y me dio esta chance, con un compromiso muy marcado hacia la gente que menos tiene”, relató.