La decisión de la megaplataforma de rendirle tributo a la directora de cine, actriz, guionista, artista plástica y cinematográfica belga, Agnès Varda, que murió en 2019 a los 90 años, fue que justamente el 13 de diciembre de 2014 la Academia de Cine Europeo le otorgó un premio honorífico a la trayectoria.

Nacida en Bruselas el 30 de mayo de 1928 bajo el nombre de Arlette, fue la gran voz femenina de la Nouvelle Vague. 

En su larga vida fue fundamental en la lucha de los derechos de las mujeres, y filmó historias de género en muchas oportunidades.

A los 12 años se mudó con su familia a Séte, Francia. 

El motor de búsqueda de Google la ubica como estudiante de historia del arte y fotografía antes de comenzar su carrera haciendo retratos para algunas revistas y el Théâtre National Populaire.

Combinó la ficción con debates de estilo documental en sus primeras películas, empezando por La Pointe Courte en 1955.

Su originalidad en la dirección se basó en que desarrollaba una creatividad intuitiva, alejada de los cánones convencionales, debido a que no pertenecía a la elite de la industria cinematográfica francesa, por ser autodidacta.

Para ella, la realidad estaba llena de pequeños detalles que nos hacen reflexionar sobre quiénes somos y cómo nos relacionamos con nuestro entorno.

Fue de ese modo la iniciadora de la nueva ola francesa. Acumuló en su vasta carrera más de 40 filmes, entre cortometrajes, largometrajes y documentales.

Entre sus obras más notables se encuentran Cleo de 5 a 7, Vagabond y The Gleaners and I. Su documental más célebre fue 'Los espigadores y la espigadora' (2000).

En 2003 comenzó con videoinstalaciones de arte inmersivo, que se exhibieron en ciudades de todo el mundo.

En la militancia en defensa de la mujer, fuera del celuloide, firmó el Manifiesto de los 343 con otras mujeres francesas, en el que declararon públicamente que habían abortado en el pasado a fin de presionar a los responsables políticos para que los legalizaran.

Entre los varios reconocimientos que obtuvo figura un premio Lumières y una nominación al Oscar por Visages Villages (Faces Places), un premio César por Les Plages d’Agnès (Las playas de Agnés), un León de Oro por Sans toit ni loi (Vagabond) y un Oscar honorífico por los logros de su vida en el cine.

Se casó dos veces, la primera con el director teatral Antoine Boursellier -con quien en 1958 tuvo a su hija, Rosalie- y la segunda en 1962, con Jacques Demy, a quien acompañó hasta su muerte en 1990.