Nacida en una familia burguesa del norte de Hampshire, Inglaterra, Jane Austen comenzó a escribir los primeros capítulos de "Orgullo y prejuicio" en 1796, sin imaginar que se convertiría en una de las novelas clásicas de la literatura inglesa. Con Elizabeth Bennet como protagonista, una joven de veinte años joven y bella, que a diferencia de sus cuatro hermanas no sueña con casarse y tener hijos, sino que desafía las exigencias de la sociedad inglesa del siglo XIX en busca de su genuina felicidad.

Tras la muerte del Señor Bennett, parecía que el casamiento era la única forma que tanto Elizabeth como Jane, Mary, Catherine y Lydia tuvieron un buen futuro asegurado, ya que al ser mujeres no podía heredar la fortuna de su padre, que solo podía recibir el linaje masculino. Y aunque la llegada de Charles Bingley, un hombre inteligente, buenmozo, agradable y adinerado revolucionó a las jovencitas del vecindario, que ansiaban encontrar en él al esposa ideal, la protagonista no tiene muchas expectativas al respecto.

Sin embargo, no pudo evitar fijar su atención en Fitzwilliam Darcy, íntimo amigo de Bingley, un hombre tímido y orgulloso que en un princi,io se negó a acercarse a ella por el simple hecho de pertenecer a distintas clases sociales. El primer encuentro fallido entre los protagonistas le da pie a una serie de idas y vueltas, cargadas de ironías, en la que descubrirán que más allá de los prejuicios tienen entre sí, fundados por encuentros desafortunados y falsos rumores, tienen muchas cosas el común. Y, lo más importante, es que podrán hacer prevalecer su deseo por sobre lo que se espera de ellos.

La obra de Austen fue rechazada por un editor en 1797, pero tras dedicarle varios años a la revisión y corrección del texto, con ayuda de su hermano Henry, en 1812 la autora le presentó el manuscrito al mismo editor que anteriormente había publicado "Sentido y sensibilidad" y obtuvo una respuesta positiva. Finalmente, el libro que inicialmente se iba a llamar "Primeras impresiones" fue publicado el 28 de enero 1813.

En ese entonces, la escritora tenía 37 años y le quedaban solo cuatro de vida, razón por la que no pudo cosechar de lleno el éxito de su obra. De hecho, había decidido, al igual que muchas mujeres de su época, publicar sus historias de manera anónima bajo la firma "By a lady" -que significa "Por una señorita" en inglés-, aunque tanto su familiares más cercanos, que siempre la acompañaron en su pasión, y algunos miembros de la sociedad burguesa estaban al tanto de su desempeño como novelista.

"Orgullo y prejuicio" tenía un argumento totamente innovador para la época, motivo por el que no terminaba de convencer a los críticos literarios. Sin embargo, con el paso del tiempo y tras la muerte de la autora, la novela comenzó a tener cada vez más reconocimiento y se convirtió en objeto de estudio en el ámbito académico por cómo retrató a la sociedad y sus normas, por el realismo con el que creó a sus personajes y por el recurso de la ironía con el que le daba un toque personal.

En 1870 , James Edward Austen-Leigh, sobrino de la escritora, publicó su primera biografía con detalles que hasta el momento eran desconocidos por el público general y reavivó la popularidad de Austen y, con el paso del tiempo, expuso las ideas modernas y revolucionarias que había plasmado en sus historias, que a lo largo de los años fueron adaptadas al cine y la televisión.