image.png

Linen, 1912, Natalia Goncharova.

Por Gisela Asmundo

El 14 de septiembre de 1913 una performance tomó sitio en las calles de Moscú, artistas con extrañas pinturas en la cara marcharon por una arteria de moda siendo perseguidos por la prensa.

image.png

Esto fue un optimista y energético gesto del espíritu del nuevo Avant-Garde, de cuyo centro emergió una artista líder de 32 años llamada Natalia Goncharova, la primera modernista en tener una exhibición retrospectiva en Rusia.

Una especie de truco publicitario para anunciar su muestra, aunque Goncharova ya era conocida por haber sido acusada de obscenidad y por haberle confiscado sus cuadros. ¿Su crimen? Transgresión. Porque las autoridades consideraban que una mujer no podía pintar desnudos femeninos tan explícitamente.

También había ofendido a la iglesia con su obra, al no existir un lugar para el arte moderno dentro de la misma.

Goncharova fue una especie de mujer renacentista, pintora, grabadora, también diseñó textiles, moda, vestuario teatral y escenografía.

Nació en Rusia en 1881, en el seno de una familia de origen aristocrático pero no pudiente. Creció en el campo rodeada de arte y artesanía tradicional que al final terminaron por influenciarla.

image.png

Cuando tenia 11 años su familia se mudó a Moscú, la perdida de su infancia produjo un efecto profundo en ella, al reflejarse los trastornos movilizadores que ocurrían en Rusia, la cual estaba cambiando de una sociedad agrícola a una industrial.

Natalia Goncharova tenia 19 años cuando estudiaba arte y se encontró con el artista y compañero Mikhail Larionov; "Mikhail... mi conciencia trabajadora, mi diapasón".

A partir de ese momento trabajaron lado a lado y permanecieron juntos por el resto de sus vidas.

Esos eran tiempos turbulentos en la ciudad con activistas políticos luchando en las calles y artistas disidentes haciendo performances en los teatros.

Goncharova y Larionov abrazaron esa atmósfera de revolución para buscar establecer una escena radical del arte. Ellos se unieron a sociedades y fundaron nuevos movimientos, pero permanecieron comprometidos con la idea de que los comienzos del arte moderno podían ser encontrados en lo tradicional y religioso del arte del Este, rechazando la pretendida universalidad del arte occidental. Goncharova irónicamente sostuvo: "Encuentro ridículas esas personas que abogan por la individualidad y asumen que... hay algún valor en su 'yo'...".

Esta pareja artística inventó su propio estilo, el Rayonismo, descripto como los rayos de luz que se interceptan y rompen alrededor de los objetos distorsionando una imagen.

Pero la naturaleza inquieta de Goncharova no pudo estar atada a un solo estilo, ella estaba interesada en explorar diferentes formas del arte y lo hizo muy prolíficamente.

De modo que su famosa exhibición de 1913 presentó una asombrosa muestra de 800 trabajos, con un éxito rotundo que cautivó a la sociedad rusa. Incluido Serge Díaghileff empresario fundador de los Ballets Rusos, una compañía de la que surgirían muchos bailarines y coreógrafos famosos. Serge Diaghileff sostuvo: "Lo curioso es que la gente joven no solo emula su arte, también imita su apariencia".

Invitándola a colaborar en su propio trabajo, y conquistando París con su épico diseño de vestuario para la opera ballet "El Gallo de Oro".

image.png

Natalia Goncharova y Mikhail Larionov en el contexto de la escenografía de la ópera-ballet "El gallo de oro" en los talleres del Teatro Bolshoi, Moscú (1913)

image.png

Diseño del traje para una mujer campesina, para "El Gallo de Oro" de Natalia Goncharova.

image.png

Traje para el Coq d'Or en la producción de los Ballets Rusos de 'Le Coq d'Or' (El gallo de oro), Inglaterra, Londres, 1937; basado en el diseño original de 1914. Lamé, punto de hilo metálico, seda, punto de seda, piel dorada, red.

En 1915, Goncharova y Larionov se fueron a recorrer diferentes lugares con los ballets y nunca más regresaron a Rusia, estableciéndose en París.

image.png

Leonid Myasin, Natalia Goncharova, Mikhail Larionov, Igor Stravinsky y Leon Bakst en la terraza del Bellerive.

Pronto se convirtieron en el centro de los artistas avant garde emigrados y fueron rodeados por otros artistas huyendo de las atrocidades de la Primera Guerra Mundial y de la Revolución Rusa.

Goncharova trabajó como diseñadora de modas y enseñó a los adinerados americanos a pintar. Fueron ellos los que compraron sus trabajos generando que recibiera comisiones de Chicago Y Nueva York.

También colaboró con otros artistas internacionales y cuando su glorioso diseño para "El Pájaro de fuego" de Stravinsky fue celebrado por la prensa, le siguieron invitaciones para exhibir; pero el contragolpe de la inteligencia rusa le hizo imposible retornar a su país. Abrazando su condición de forastera y estableciéndose en París por el resto de su vida.

image.png

Escenografía para el telón de fondo de la escena final de El pájaro de fuego (1954), Natalia Goncharova. Museo Victoria y Alberto, Londres.

Su sabia energía ayudó a encender una revolución y evolución en el arte moderno y permitió desafiar las convenciones sociales y artísticas del momento, volviéndose la primera artista mujer del avant garde de Rusia.

image.png

Aproximación a la obra "Linen" de 1912:

En esta obra no observamos las líneas inclinadas y alargadas de los rayos que se interceptan y se fragmentan al chocar con un objeto, asociados al Rayonismo.

La influencia del Cubismo fue evidente en sus pinturas que se incluyeron en la primera exposición del grupo radical independiente Jack of Diamonds (Jota de Diamantes), que tuvo lugar en 1910-11; en estas obras se mostraban visiones fragmentadas y abstractas de temas en relación con el arte popular ruso y su vestimenta.

Mikhail Larionov, pareja de Goncharova, quien inició la tendencia de la moda experimentando con la pintura facial, puede ser considerado uno de los primeros innovadores.

El Manifiesto del Futurismo estimulaba estos cambios, "Es hora de que el arte invada la vida".

El interés de Goncharova en el desarrollo de la vestimenta se manifiesta en sus bocetos creados para Nadezhda Lamonava, una famosa diseñadora de moda de Moscú, y proveedora de la corte de su majestad imperial, la emperatriz Alexandra Fedorovna.

Los bocetos de Goncharova fueron un entrelazamiento orgánico de motivos nacionales, siluetas reales y patrones geométricos. Los ornamentos populares rusos, a los que amaba desde su infancia, siempre fueron una inspiración.

En la obra "Linen" (Ropa blanca) se observa un forma temprana de imágenes abstractas, lo que encontramos aquí son piezas de lavandería, podemos ver los encajes, los puños y cuellos de camisa.

A finales del siglo XIX y principios del XX, el blanco en las camisas era signo de distinción, curiosamente la razón no era una moda de temporada sino algo mucho más práctico. La aristocracia y gente adinerada podía lavarla a menudo y mantenerla limpia, algo que no era común en la clases bajas que debían trabajar de "sol a sol".

En "Linen" se podría pensar que estas prendas prolijamente planchadas y dobladas también fueron almidonadas como marcaba la época.

La plancha en la obra, está dividida en formas angulares comenzando a fragmentarse, el esquema del color en general es muy "fresco" con blancos y tonos azulados denotando pulcritud, luego el gris más oscuro y las letras brillantes en ruso realzan la composición.

Las inscripciones rusas sugieren un letrero de lavandería: Prache es parte de la palabra para lavandería, b.s. es una abreviatura de "lavado blanco", y BOT posiblemente forma parte de la palabra "rabota" que significa "trabajo". La plancha lleva un monograma con las iniciales de la artista.

Esta pintura transmite el bullicio y la modernidad de una lavandería comercial, expresiones emparentadas al Futurismo; pero también puede interpretarse como una alusión codificada sobre la relación de Goncharova con su compañero, el artista Michel Larionov.

Los dos lados de la pintura se dividen entre prendas masculinas, camisas, cuellos y puños; y femeninas, encajes, blusas, y delantales.

Natalia Goncharova:

Goncharova nació el 21 de junio de 1881 hija de Sergei Nikolaevich Goncharov y Ekaterina Ilinichna Belyaeva en la ciudad de Negaevo en Rusia.

Su padre era arquitecto y matemático. La familia de su madre tenía estrechos vínculos con el sacerdocio, y su abuelo materno enseñó en la Academia Teológica de Moscú.

En 1892, Natalia se mudó a Moscú con su familia y comenzó su educación formal.

Se graduó en el Cuarto Gimnasio para Jóvenes Damas en 1898 y comenzó a asistir al estudio de un escultor local donde conoció el movimiento de Artes y Oficios ingles y el Art Nouveau alemán (Jugendstil).

En 1901, se unió a la Escuela de Pintura, Escultura y Arquitectura de Moscú, donde conoció por primera vez Mikhail Fedorovich Larionov, quien se convirtió en su compañero de vida.

image.png

Jardinería, Natalia Goncharova, 1908. Óleo sobre lienzo 1029 × 1232 m.

En 1908, se presentó una muestra de pintura franco-rusa en El Salón del Toisón de Oro, que se llevó a cabo en la casa de la familia Kludov en Moscú, influyendo en Goncharova y sus compañeros artistas, que sentían admiración por los artistas modernistas europeos.

"Los pintores franceses modernos me abrieron los ojos y comprendí la gran importancia y el valor del arte de mi tierra natal y, a través de él, el valor del arte de Oriente".

La obra de Goncharova Jardinería de 1908 fue un prototipo de sus primeras obras que se basaron en el arte popular tradicional. Esta obra es típica de sus representaciones de la vida campesina y fue realizada en la época de su estancia en una finca familiar en la Rusia rural, combinando dispositivos de Oriente y Occidente.

Los pliegues de las vestimentas de las campesinas recuerdan el tratamiento de los paños en la pintura de iconos evangelistas.

image.png

Natalia Goncharova, Los Evangelistas 1911, óleo sobre lienzo, 204 × 58 cm cada una.

Y la vegetación parece inspirada tanto en los lubki como en la exuberante y fantástica vegetación de Henri Rousseau.

Mientras que los otros artistas contemporáneos buscaban el llamado arte "primitivo" más allá de Europa, como por ejemplo el Cubismo; Goncharova celebró la cultura autóctona de Rusia:

"Si ensalzo el arte de mi país es porque creo que ... debería ocupar un lugar más honorable del que ha ocupado hasta ahora".

En 1910, comenzó a incorporar en sus paisajes algunas de las características del lubok ruso, un popular estampado de colores con gráficos simples, así como juguetes infantiles tradicionales.

En las figuras de Los Evangelistas, las mismas están realizadas con sencillez y dignidad. La línea y la manera de generar el volumen nos remiten a Cezanne.

Goncharova desafió los tabúes tradicionales contra las mujeres que pintaban iconos y socavó las convenciones aceptadas contra la mezcla de imágenes sagradas y profanas.

La Cola de Burro, fue una exposición radical e independiente celebrada en Moscú en 1912, y estuvo dominada por la obra de Goncharova.

Ese mismo año Goncharova y Larionov fundaron una escuela de pintura basada en el arte ruso: el icono, el grabado lubok, el letrero, las bandejas pintadas, juguetes para niños y arte popular.

También trabajaron con poetas para publicar libros ilustrados de poesía de vanguardia.

Con Larionov, Goncharova desarrolló un nuevo estilo de pintura abstracta, publicando un manifiesto sobre El Rayonismo, una forma temprana de arte abstracto, caracterizado por la interacción de formas lineales derivadas de rayos de luz.

image.png

Composición Rayonista c.1912-13.

Gracias a los logros del Futurismo y el Cubismo, este nuevo estilo no se preocupó de pintar un objeto, sino que se centró en representar los rayos que se reflejaban en él mismo y las intersecciones de estos rayos en el espacio.

Al explorar esta idea, Goncharova produjo obras abstractas como Composición Rayonista c.1912-13.

En 1921, contribuyó a la exposición Russian Arts and Crafts en la Whitechapel Gallery de Londres.

Durante las décadas de 1920 y 1930, Goncharova continuó pintando, enseñando, ilustrando libros y produciendo diseños para producciones de ballet y teatro.

La muerte de Diaghilev en 1929 significó que Goncharova perdió al principal patrocinador de sus diseños experimentales de escenarios, aunque continuó trabajando en óperas.

image.png

Una escena del ballet El pájaro de fuego, años 50.

Goncharova permaneció involucrada con el teatro por el resto de su vida, siendo una de las dos únicas mujeres que diseñaron para los Ballets Rusos de Diaghilev y la única involucrada en el diseño de escenarios.

¡Los diseños de Goncharova son simplemente fabulosos! Son extremadamente poéticos y muy interesantes en términos de color! Serge Diaghilev.

image.png

Natalia Goncharova Medusa Diseño de vestuario para el ballet Sadko 1915-1916 Galería estatal Tretyakov (Moscú, Rusia).

Por Gisela Asmundo, licenciada en historia del arte. Esta nota tiene derechos reservados.

PARA ACCEDER A TODAS NOTAS DEL OJO DEL ARTE CLICK ACÁ