El paso del tiempo inevitablemente provoca un deterioro en las piezas de arte. Es por eso que es importante procurar presevarlo y -en algunos casos- restaurarlo. Particularmente las pinturas rupestres son amenazadas, no solo por su antigüedad, sino las condiciones climáticas y humanas a las que están expuestas.

Por ejemplo, en Indonesia existen pinturas rupestres de hace más de 45.000 años y poco a poco empiezan a desvanecerse. Por ello, es importante descubrir las causas de su deterioro para conseguir frenarlo y así, conservar el legado de nuestros antepasados. De acuerdo con una publicación de Nature, que reproduce National Geographics, científicos y especialistas en arqueología ya trabajan para conservar las pinturas de ese país del sur asiático.

Aproximadamente el 65% de las cuevas en el sur de Célebes, la isla indonesia donde están las pinturas, cuentan con alguna obra rupestre. He ahí la relevancia patrimonial de la zona y la importancia de los esfuerzos científicos y arqueológicos por conservar las piezas lo mejor posible.

Debido a la delicadeza de obras tan antiguas y frágiles, el tratamiento sobre ellas no es una labor sencilla. Aunque su preservación esté bien intencionada, es importante que los especialistas a cargo consideren los retos que esto implica; por ejemplo, Rustan Lebe (un arqueólogo de la Oficina de Preservación Cultural en Indonesia) mencionó para Nature que el principal problema es el desprendimiento de las capas de piedra.

Además, Lebe señaló que dicho desprendimiento ahora ocurre a un ritmo alarmante. Tristemente los arqueólogos especulan que una de las principales razones para explicarlo es el mismo ser humano. La contaminación vehicular de la zona y la respiración de los visitantes, podrían estar acelerando la desaparición de las pinturas.

Otra posibilidad es que la industria local esté empeorando los microclimas de las cuevas. Las vibraciones y el polvo producido por la minería de la zona, podrían estar afectando a las pinturas.

Sin embargo, hasta ahora estas son solo especulaciones y los esfuerzos por conservar -en medida de lo posible- las obras ancestrales, apenas empiezan.

El delicado futuro de las pinturas rupestres

Semen Tonasa, la empresa productora de cemento más importante de Indonesia, planea tomar pedidas importantes para evitar el deterioro del arte. Esto es especialmente interesante considerando que el cemento se produce a partir de las montañas cársticas, el hogar de las pinturas.

Desde 2022, Semen Tonasa selló una carretera para reducir el tráfico de vehículos; además, han buscado mojar las carreteras para evitar el esparcimiento del polvo.

Finalmente, aunque aún no sea definitiva la conservación de las pinturas, las medidas arqueológicas, científicas y empresariales para hacerlo, dibujan un escenario esperanzador para el patrimonio de las cuevas de Célebes.