Especial El ojo del arte

En el barrio Las Cañitas, una zona donde no abundan las obras de arte, se erige una pequeña escultura que encierra una historia de superación y devociónMujer con gato, tallada en un único bloque de mármol de Carrara, es de un tamaño modesto digna de admiración por la calidad de sus formas.

Esta obra maestra lleva la firma de Maxime Real del Sarte, escultor nacido en París en 1888. A pesar de sufrir la amputación del antebrazo izquierdo tras resultar gravemente herido en la Primera Guerra Mundial, Real del Sarte demostró su destreza artística. Formado en la École de Beaux-Arts, su talento trascendió las adversidades. Incapaz de empuñar el cincel él mismo, contrató a escultores para ejecutar sus diseños exactamente según sus instrucciones y así diseñó más de cincuenta monumentos.

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La escultura, de estilo art deco, tiene un pasado intrigante que está ligado con nuestra historia reciente. Inicialmente adquirida por el empresario naviero Alberto Dodero, quien la donó a la Municipalidad de Buenos Aires, la obra encontró su lugar en la residencia del presidente Juan Domingo Perón y Eva Duarte. Tras el derrocamiento de Perón en 1955, la vivienda fue demolida, y la escultura fue trasladada a Mataderos. En ese predio donde vivían Perón y Evita, en Avenida del Libertador, entre Austria y Agüero, hoy se erige el edificio de la Biblioteca Nacional.

El ojo del arte: Mujer con gato, una historia de superación y devoción

Finalmente, en 1983, la escultura encontró su hogar definitivo en la plazoleta del boulevard Chenaut. Colocada a la altura de la gente sobre una estructura de adoquines, permite a los espectadores admirar cada detalle de la devoción que la mujer arrodillada siente por su mascota. Una escultura similar, también de mármol aunque de menores proporciones pertenece a una colección privada en Francia.

En definitiva, su historia es la de un tributo a la determinación y al amor por el arte, demostrando que la pasión y la perseverancia pueden vencer cualquier obstáculo. Y es también un recordatorio de la intemporal conexión entre los seres humanos y los felinos, una relación que se ha plasmado a lo largo del tiempo en diversas manifestaciones artísticas en todo el mundo.