El Club de Trapecistas cumple 20 años como espacio de experimentación, formación y entrenamiento en técnicas de acrobacia aérea, fusionando distintos lenguajes expresivos y técnicos. 

El espacio ubicado en las inmediaciones del Parque Centenario actualmente es referente mundial como escuela y espacio del circo contemporáneo. A lo largo de estas dos décadas ha sido lugar de creación y gestación de premiados espectáculos teatrales, circenses y musicales. 

Su fundadora y directora Mariana Sánchez, junto a su compañía Circo Negro, que este año cumple 19 años de existencia, llevan estrenadas las siguientes obras: Mamushka (2005), Mandalah (2008), Grandes éxitos (2010), Brumadhia (2011), Treptikon (2013) y Aniversario (2014- 2016). 

Este año, para festejarlo, estrenaron Ceremonia, circo negro; una obra sobre el universo femenino protagonizada por mujeres que en una gran telaraña hecha de cuerdas que tejen los hilos del destino. El tiempo de la vida y de la muerte. El cuerpo y el espíritu. Las siluetas que insinúan cuerpos… el viaje es hacia dentro y el propio imaginario completa la forma. 

En el marco de los festejos se inaugura la galería de arte con una exposición de fotografías en las que se recupera la historia del Club y sus inicios. Se puede ver sábados y domingos .+

CLUB DE TRAPECISTAS

Qué es El Club de trapecistas 

El Club de Trapecistas aparece en la escena teatral en 2004 fusionando la formación de acróbatas aéreos con producciones independientes propias y de terceros. Este objetivo se lleva a la práctica, a través de tres pilares que conforman el Club: La escuela de circo, la programación de sala y la Compañía Circo Negro.

Se trata de uno de los pocos espacios alternativos del circuito independiente de la Ciudad de Buenos Aires que cuenta con una altura e infraestructura para el desarrollo de espectáculos y actividades aéreas y acrobáticas, fusionando la actividad teatral con el movimiento del Nuevo Circo, con propuestas que combinan todas las disciplinas escénicas.  

Con el espíritu de los clubes de antaño, el Club de Trapecistas abre sus puertas al público ofreciendo espectáculos para la familia, pero en un espacio renovado y asombroso, que se deja descubrir al atravesar la larga galería que separa la sala de la vereda.