El "descanso" que el coronavirus le dio a la naturaleza no tendrá efecto en los glaciares
A pesar del aislamiento de buena parte de la sociedad en el mundo, el cambio climático avanzará.
Por Pablo Tallón I Especial para Noticias Argentinas
Mientras en el mundo sorprenden las imágenes de la naturaleza "reviviendo" ante el aislamiento social por la pandemia de coronavirus, los glaciares no van a sumarse a esa situación, ya que su "respuesta ante el cambio climático no es instantánea", advirtió un especialista.
Ante la pandemia de coronavirus casi la mitad de la población mundial fue aislada de manera voluntaria u obligatoria y esa medida, con la consecuente reducción del nivel de contaminación y movimiento en las calles, hizo que se pudieran registrar animales de distintas especies en entornos urbanos y que algunos cursos de agua se aclararan, imágenes que llamaron la atención de la opinión pública.
Sin embargo, los glaciares, definidos por los expertos como "uno de los mejores indicadores del cambio climático para la ciencia", no van a sumarse a la alegría de los ambientalistas, debido a que su tendencia de retrocesos no varían en tan sólo un mes.
"Los glaciares responden a los cambios climáticos ajustando su morfología, pero este ajuste no es instantáneo. Dependiendo del tamaño y velocidad del glaciar y de la magnitud del cambio climático, los glaciares pueden tardar desde algunas décadas hasta cientos de años", explicó el geólogo Lucas Ruiz en diálogo con NA.
En ese sentido, el investigador adjunto del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA) recordó un estudio de especialistas alemanes y austríacos publicado en 2018: "Si se dejara de emitir dióxido de carbono ya y sólo quedara el consolidado, los glaciares van a seguir perdiendo masa: se calcula que un 25 por ciento del volumen global (al 2015) de glaciares se derretiría a finales del Siglo XXI".
En la Argentina, incluyendo las islas del Atlántico Sur, se relevaron 16.968 cuerpos de hielo ubicados, en su mayoría, a lo largo de la Cordillera de los Andes, dentro de las jurisdicciones de las 12 provincias que comparten el cordón montañoso, de acuerdo a los datos del Inventario Nacional de Glaciares publicado en 2018.
En total, los cuerpos de hielo suman 8.484 kilómetros cuadrados y aportan agua en 36 de las 96 cuencas hídricas del país, en donde viven más de 7 millones de personas.
En ese sentido, Ruiz subrayó que los glaciares también cumplen un rol vital en el sistema productivo de muchas actividades: "Son vitales para muchas economías regionales que depende del agua de la Cordillera para el riego".
"No podemos darnos el lujo de desconocer a los glaciares", remarcó el especialista.
Asimismo, consideró que "la respuesta global ante la pandemia de coronavirus es un muy buen ejemplo de que se puede enfrentar un problema en conjunto" y reclamó que se tome con la misma coordinación el cambio climático.