Trabajadores y empresarios del sector gastronómico de la ciudad de Mar del Plata armaron hoy un restaurante en el medio de la calle para reclamar por la reapertura de la actividad tras 90 días de cuarentena.

Este martes por la mañana, los manifestantes se juntaron frente al municipio en donde pusieron mesas y sillas que simulaban un restaurante.

Además, tiraron bombas de estruendo, y con bombos y aplausos reclamaron el regreso de la actividad a la ciudad balnearia.

"Mar del Plata está trabajando con mucha responsabilidad, justamente para que el protocolo de apertura contemple evitar cualquier tipo de contagio. Lo primero que queremos nosotros es que todas las personas que visitan nuestros negocios tengan las condiciones de seguridad que les garantice que no les va a pasar nada", dijo Rodolfo Parato, socio propietario del restaurante del Torreón del Monje.

En diálogo con el portal del diario La Capital, Parato se refirió a la negativa por parte de la Provincia a habilitar la actividad en la ciudad, y destacó la importancia de diferenciar la situación epidemiológica local con la de otros sectores bonaerenses.

"Hace casi 90 días que estamos cerrados. Con el delivery y el take away no alcanza para cubrir los costos", dijo al portal 0223 Leandro Estavillo, uno de los propietarios del restaurante Bruto, quien además sostuvo que "la ayuda del Gobierno es irrisoria para el formato de los negocios".

Junto a Fernando Daumas, dueño de la parrilla Mandinga, Estavillo dijo que la situación que atraviesa el sector "es trágica" y "terminal".

"Hace cuatro meses que estamos parados. El invierno es muy áspero en Mar del Plata. Quienes alquilamos tenemos una situación muy complicada y no tenemos una ayuda concreta por este tema", agregó Daumas.

Las cámaras empresariales del sector gastronómico sostienen que en Mar del Plata hay un total de 1.800 locales y unos 30 mil empleados.